Ese es el perfil político que registran dos encuestas
recientes. La primera, de Ferrari Nasi Consulenze, refleja una evolución hacia posiciones más centristas y
moderadas de los votantes de todos los partidos políticos, tanto de izquierdas como de derechas, salvo
el M5S, que se mantiene estable (posiblemente porque su enfoque sea muy ajeno a
la dicotomía izquierda-derecha).
La transformación de SEL en SI y la
aparición del nuevo MDP, fruto de una escisión del PD, hace que se modere la izquierda electoral pasando del 1´9 al 2´7, un salto de 0´8 en la escala. El camino al centro es generalizado: AP 1, LN 0´7, PD 0´6, FI
0´5 y FdI-AN 0´3.
La segunda, de Euromedia,
mide la opinión respecto a la descentralización del país. Están a favor de una mayor autonomía regional el 46,3% de los
italianos y en contra el 24,9%, mientras que el resto, 28,8%, están indecisos u optan por la abstención.
La encuesta no se ha realizado ni en Lombardía ni en el
Véneto, regiones que celebran el próximo día 22 de octubre un referéndum al
respecto, promovido por la Lega Nord. En ambas regiones las
encuestas pronostican un rotundo triunfo del SI (80%-90%) pero con el riesgo de no
cumplir con el quórum del 50% de participación. El presidente de Liguria,
Giovanni Toti (Forza Italia) también ha iniciado los trámites para convocar un
referéndum similar en su región, al que podría unirse Piamonte.
Por macro-regiones el resultado sería:
Flash: encuesta de Piepoli para las elecciones regionales del 5 de noviembre en Sicilia. El
centroderecha se afianza en primera posición (37%). Y en la izquierda se va aclarando la situación
a favor de Micari (PD, AP) que tendría un 28% frente al 4% de Fava (SI, MDP). El
M5S (29%) ve peligrar su segunda posición.
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