Tras el paréntesis del verano se reanudan las complicadas
negociaciones para consensuar un nuevo sistema electoral. Hoy se ha reunido el
Comité de Asuntos Constitucionales donde se han constatado las diferencias entre
los partidos.
Matteo Renzi (PD), que apostó por el sistema alemán, ahora se
decanta por uno más proporcional. En cambio Silvio Berlusconi (FI) se mantiene
en el sistema alemán y su socio Matteo Salvini (LN) apuesta por la Mattarellum.
La Stampa publica hoy que en caso de no conseguirse el
consenso para cambiar la ley electoral un grupo de juristas estaría listo para
reformar el actual sistema electoral que armonizará la elección de la Cámara y
del Senado, modificará los umbrales y eliminará las coaliciones
(obligando a ir en listas unidas), introducirá listas abiertas en las cabeceras
y mantendrá el bonus para quien gane y supere el 40%.
Con las encuestas más recientes esta última opción implicaría una fuerte inestabilidad en la próxima legislatura.
Interesante se presenta la elección de los candidatos de las
principales listas. El escenario más claro lo tiene el M5S, cuyos votantes
apuestan mayoritariamente por Luigi Di Maio. El centroizquierda se decanta por
Matteo Renzi debido al peso del PD pero sus aliados de izquierdas prefieren a
Pier Luigi Bersani o a Giuliano Pisapia. El centroderecha, cuya confluencia está
más avanzada, se encuentra dividido entre Matteo Salvini y Silvio Berlusconi.